Tres telescopios en la entrada de la Facultad de Ciencias permitirán a los ciudadanos seguir el eclipse solar este viernes

Esta es una de las actividades que se han programado en la facultad, en colaboración con www.ventanaestelar.com, la agrupación de Estudios Astronómicos Salduie (EAS) y el Instituto Universitario de Matemáticas y Aplicaciones (IUMA) de la Universidad de Zaragoza para observar este eclipse parcial de Sol, que alcanzará su momento álgido o de máximo oscurecimiento (del 66.8%) a las 10 horas 13 minutos y 49 segundos y que se prolongará durante casi tres minutos.

 

Con eta actividad se pretende invitar a los que lo deseen a contemplar este eclipse de Sol, que se produce cuando la Luna, en su fase de luna nueva, se interpone entre el Sol y La Tierra, proyectándose su sombra sobre la superficie de nuestro planeta, tal como explican dos de sus organizadores, Manuel Membrado, profesor titular de Astronomía y Astrofísica, y Luis Rández, catedrático de Matemática Aplicada.

El Sol y la Luna presentan una relación asombrosa: el Sol tiene un radio que es 400 veces superior al de la Luna, y se encuentra 400 veces más lejos que ella. Esto hace posible que, durante un eclipse, el disco solar pueda quedar oculto tras la Luna. Cuando se da esta circunstancia, el día se vuelve noche durante unos minutos. En ese caso, se dice que el eclipse de Sol es total.

 

Sin embargo, el eclipse de Sol que se podrá contemplar este 20 de marzo de 2015 en Zaragoza es de tipo parcial. Esto significa que la Luna no va a cubrir por completo el disco solar. El comienzo de este proceso de ocultación comenzará a las 9 horas 8 minutos y 52 segundos y finalizará a las 11 horas 24 minutos y 4 segundos.

 

Dos de los tres telescopios que se instalarán en la entrada de la facultad de Ciencias visualizarán la cromósfera solar en CaII y en H-alfa, mientras que el tercero permitirá apreciar la fotósfera solar, proyectando el Sol sobre una pantalla blanca. La visualización de la cromósfera solar durante el eclipse se transmitirá vía web en www.ventanaestelar.com ,  en la que habrá que seleccionar “Eclipse parcial  20/03/2015” en el menú principal.

 

La fotósfera es la parte de la atmósfera solar que es observable a simple vista. Se extiende desde la superficie del Sol hasta unos 500 km de altitud y presenta una temperatura media de 6.000 grados. En ella se observa la granulación solar y las manchas solares.

 

La cromósfera es la siguiente capa atmosférica y se extiende desde el final de la fotósfera hasta una altitud que varía entre los 2.000 y 5.000 km. Su temperatura alcanza los 25.000 grados y su estructura está gobernada por el campo magnético. Es trasparente y solo puede apreciarse usando filtros especiales que solo dejan pasar luz procedente de los iones de calcio y de los átomos de hidrógeno localizados en sus partes más externas. Con el filtro azul de CaII se visualiza la estructura en forma de red de la cromósfera. Con el filtro rojo H-alfa se observan las protuberancias y filamentos que dan lugar a las tormentas solares.

 

Los expertos recuerdan que mirar al Sol directamente durante el eclipse sin la protección adecuada podría conducir a la pérdida irreparable de la visión. De ahí que aconsejen no observar el Sol con radiografías, carretes de fotos, cristales ahumados, o gafas de Sol, dado que no son las protecciones adecuadas. La observación directa del Sol con un prismático o un telescopio sin los filtros adecuados lleva a la pérdida casi instantánea de la visión.

 

La forma más segura de observar un eclipse de Sol es la observación indirecta, que consiste en proyectar la imagen del Sol que se obtiene de un prismático o de un telescopio sobre una lámina blanca.

 

Para la observación directa es necesario el uso de filtros solares que bloquean el 99.9999% de la luz solar. Las láminas de filtro solar tipo Mylar son las más adecuadas y económicas para realizar una observación solar de la forma más segura. Baader Planetarium es el fabricante más reputado de estas láminas. Baader también comercializa gafas que contienen estas láminas.

El Edificio de Matemáticas se diseñó para albergar un observatorio astronómico. Para dar estabilidad a las observaciones se construyó una columna que va desde la planta del observatorio hasta sus cimientos y que sirve de base para telescopios. La cúpula de cinco metros de diámetro del Observatorio es de la prestigiosa empresa estadounidense Ash Dome, y es similar a las cúpulas de 9 y 6.5 metros que se encuentran en el Observatorio Astronómico Sierra Nevada (IAA).

 

En el observatorio se dispone de dos pequeños telescopios. Uno de ellos es un refractor Carl Zeiss Jena construido alrededor de 1920, cuyo motor de seguimiento es a base de poleas y pesas. El segundo telescopio es un reflector Meade.