(Zaragoza, miércoles, 6 de junio de 2018). Adrián Velázquez Campoy, investigador ARAID del Instituto de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos (BIFI) de la Universidad de Zaragoza, recibió ayer el Título y Medalla de Académico Correspondiente de la sección de Biotecnología de la Real Academia Nacional de Medicina (RANM). Este nombramiento tuvo lugar en el marco de una Sesión Científica en la que participó junto con el Académico de Número y Vicepresidente de la RANM, Eduardo Díaz-Rubio García.
En la conferencia que pronunció en su nombramiento, titulada La Biotecnología en el siglo XXI: retos y oportunidades, Velázquez Campoy manifestó que "La Ciencia sólo puede progresar a través de un compromiso básico de la sociedad: ciudadanos, políticos e investigadores” y reconoció que "La Biotecnología es una de las esperanzas del siglo XXI. Puede aportar soluciones para grandes problemas de la sociedad: alimentos, combustibles y fármacos".
Adrián Velázquez Campoy es Doctor en Físicas por la Universidad de Granada e Investigador ARAID en el Instituto BIFI (Universidad de Zaragoza) desde 2008. Tiene más de 100 publicaciones indexadas en Journal of Citation Reports (JCR) y es Investigador principal y colaborador en numerosos proyectos autonómicos, nacionales e internacionales. Su línea de investigación está centrada en el estudio estructural y funcional de proteínas diana de interés biomédico y/o biotecnológico y la búsqueda de nuevos fármacos frente a enfermedades infecciosas y enfermedades genéticas.
Los orígenes de la Real Academia Nacional de Medicina se remontan a la tertulia de médicos, cirujanos y farmacéuticos que empezó a reunirse a comienzos del siglo XVIII en la rebotica de una oficina de farmacia madrileña, donde estos ilustrados conversaban sobre el progreso y la renovación de las ciencias de la salud. Esta iniciativa se formalizó el 12 de julio de 1733 bajo el nombre de Tertulia Literaria Médica Matritense y un año después como Academia Médica Matritense, aprobándose sus primeros Estatutos, que le encomendaban el fin de promover el estudio y progreso de las ciencias médicas. Fue 1861 cuando se consagraba la denominación actual de Real Academia Nacional de Medicina.
