Sra. Vicepresidenta del Claustro,
Compañeros de la Mesa,
Sr. Presidente del Consejo Social,
Autoridades académicas,
Profesores,
Personal de Administración y Servicios,
Estudiantes,
Señoras y Señores,
Disponen con la debida antelación del Informe de Gestión y el Programa de Actuación del Consejo de Dirección con respecto al presente y futuro año respectivamente.
Han tenido ocasión según decisión de la Mesa del Claustro de presentar las mociones con antelación a la sesión. Por todo ello, me parece más interesante a la hora de hacer esta intervención describir las líneas generales de la situación de nuestra Universidad y nuestras propuestas más importantes de actuación en el presente y para el futuro inmediato.
Es de todos bien conocido que la crisis económica que atravesamos, aunque pueda ser percibida con un horizonte algo mejor del que hemos atravesado, sigue afectando de una manera muy importante a la Universidad de Zaragoza y a todo el sistema universitario español tanto desde el punto de vista de la financiación como de liquidez. Debo reconocer, sin embargo, que los apuros de liquidez que teníamos el año pasado por estas fechas son menores este año debido a dos hechos fundamentales; el primero hemos conseguido obtener crédito a corto plazo a través de otras entidades financieras diferentes a las que habitualmente nos lo facilitaban y en segundo lugar a que la premura en el abono de gastos justificados del Gobierno de Aragón ha disminuido su retraso de pago.
A pesar de ello, la situación general de financiación de la Universidad de Zaragoza sigue siendo muy difícil. Además, la Comisión que debía tratar esta financiación según mandato de Las Cortes en su ley presupuestaria para este año 2014 tan sólo se ha reunido una sola vez, precisamente para constituirse el pasado verano. Pese a nuestra insistencia no ha vuelto a producirse ninguna reunión. Por esta razón podemos afirmar con poco riesgo de equivocarnos que el borrador de presupuestos del Gobierno de Aragón contemplará la misma financiación básica y ausencia de inversión para la Universidad de Zaragoza para 2014.
También debo decir que en el día de ayer se publicó en el Boletín Oficial de Aragón la continuación de la financiación de los complementos retributivos del profesorado con una proyección de cinco años más. En otras palabras, continuaremos con las mismas cantidades absolutas previstas en los presupuestos de 2013 que considerados los deslizamientos del capítulo 1 producidos por antigüedad y evaluación docente e investigadora, junto con los incrementos de IPC, supondrá de facto una disminución real de la financiación. Si bien esta cuestión no me ha sorprendido, debo decir que dificulta extraordinariamente la gestión económica del próximo año. Esta situación se ve agravada por la disminución de ingresos en investigación. Además el estancamiento en la financiación europea previsto hasta el inicio del horizonte 2020, supondrá un retraso en las posibilidades de financiación procedentes de Europa.
A pesar de semejante situación, quiero aprovechar este momento para agradecer los esfuerzos que ha realizado la Consejería de Industria e Innovación en materia de inversión en diferentes aspectos y en particular en el apoyo a la construcción de los Institutos de Investigación Mixtos con el CSIC. Sin embargo, la disminución del gasto corriente procedente de ingresos autonómicos, nacionales y europeos por las causas que ya he mencionado dibuja, también en este ámbito, un horizonte muy poco halagüeño.
En materia de inversión tengo que agradecer el esfuerzo efectuado por el Gobierno de Aragón que nos ha permitido contemplar hace unos días la Facultad de Educación acabada. Necesitamos ayuda para el equipamiento pero poco a poco iremos viendo como las actividades docentes e investigadoras de este Centro se ubican en unas nuevas y necesarias instalaciones. No disponemos de información alguna que sugiera alguna iniciativa en materia de remodelación del edificio de la Facultad de Filosofía y Letras, un asunto prioritario para nosotros, y nuestras preocupaciones aumentan al comprobar que no podemos atajar graves problemas de urgencia en determinados edificios. La insuficiente financiación recibida durante los últimos años y la antigüedad y precariedad de los edificios antiguos, junto con los problemas surgidos en otros nuevos imposibilita atenderlos como sería menester. Una circunstancia que puede abocarnos a tener que cerrar, en breve, algunas instalaciones por falta de las medidas de seguridad necesarias.
En el área académica, en este curso ha continuado la implantación de los estudios de grado planificados siguiendo la normativa recogida en nuestro sistema interno de garantía de calidad. Igualmente hemos aprobado la reordenación de la oferta de masteres, el reglamento de oferta de formación permanente de la Universidad y se ha consolidado el funcionamiento de la Escuela de Doctorado.
En materia de personal, nuestra mayor preocupación está relacionada con las dificultades para atender a las necesidades de nuestra plantilla, tanto de profesorado como de PAS. En una reciente visita al Ministerio de Hacienda quedó claro que la tasa de reposición del 10% seguía vigente. Este hecho significa que puesto que las bajas en plantilla producidas por las jubilaciones incentivadas de profesorado han desaparecido disminuirán de forma importante el número de plazas que podremos ofertar para profesores funcionarios y los añadidos contratados laborales para el próximo año será muy escasa. Se trata de un problema de una importante magnitud para atender la carrera de formación de nuestro profesorado y el recambio de plantillas que envejecen. Sin embargo, nosotros seguimos trabajando para afrontar por un lado este horizonte muy limitado de recursos y por otro para prever un escenario de organización más flexible y acorde a las necesidades de nuestro tiempo.
Próximamente tendremos una reforma de la relación de puestos de trabajo del PAS y una nueva plantilla de referencia en la que ya saben que la Gerencia está poniendo todo su empeño.
Por otra parte se está empezando la negociación de lo que coloquialmente llamamos un nuevo POD, o sea una ordenación de las actividades del profesorado más acorde con la realidad vigente donde la investigación, la innovación docente, la gestión universitaria y la actividad docente encajen de una manera más racional. Pondremos todo nuestro esfuerzo para que estas medidas de racionalización de nuestra plantilla, tanto docente e investigador como de administración y servicios logren el máximo apoyo posible. Quizás la completa implantación de los sistemas puedan depender de alguna mejora en la financiación, pero es nuestra voluntad dar la máxima prioridad a estas cuestiones.
De la misma forma es nuestra intención profundizar en el desarrollo de la carrera investigadora de la Universidad de Zaragoza y la creación de una plantilla al respecto. Como antes he dicho los recursos permitirán pocas oportunidades para su aprovechamiento, pero es necesario disponer de la herramienta para cuando la situación mejore. Al mismo tiempo estamos decididos a analizar la gestión de Institutos ya existentes. Basta en este sentido citar el esfuerzo realizado por la Universidad en el ámbito de Ciencias de la Salud para conseguir que el Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón esté fundamentado en una Fundación que compartan las dos grandes instituciones que patrocinan la investigación sanitaria: Gobierno de Aragón y Universidad de Zaragoza. Esta cuestión avanzada en su concepción y amparada por la Agencia de Salud Carlos III, supondrá la definitiva consolidación de un sistema de calidad en investigación sanitaria que contenga a sus agentes generales.
Seguimos profundizando en nuestras acciones sobre transferencia de resultados en todos los aspectos tanto sociales como productivos, la interacción entre la Universidad de Zaragoza y los diferentes agentes sociales y empresariales va en aumento, materializándose a través de nuevos convenios de todo tipo. Los programas de apoyo a Spin Off y Start Up, la promoción de Cátedras y la aparición de empresas con futuro importante de comercialización basadas en licencias de la Universidad de Zaragoza apoyan esta realidad.
En esta misma línea de actuación, deseo señalar la voluntad de crear una nueva oficina de proyectos europeos en el Campus Iberus. Es un objetivo fundamental en su desarrollo que abrirá nueva perspectiva de financiación europea para empresas y universidades del ámbito del campus con especial incidencia en el área agroalimentaria apoyada por la Caixa.
En este sentido, la colaboración dentro del campus transfronterizo con las Universidades de Pau y Toulouse sigue creciendo a pesar de lo limitado de la financiación para la misma. Este ámbito junto con todo el iberoamericano y el esfuerzo mayor realizado con China ha caracterizado los esfuerzos de internacionalización por parte de la Universidad de Zaragoza.
Quiero señalar expresamente el apoyo que pedimos al Consejo de Gobierno para que en breve elabore un documento conjunto y consensuado que manifieste con claridad el decidido apoyo de nuestra Universidad a incrementar el esfuerzo por la becas Erasmus en paralelo al programa Erasmus plus promovido desde Europa. Igualmente la posición de esta universidad como la de todo el sistema universitario español ha sido la de reivindicar más el incremento que el mantenimiento del esfuerzo de becas para el acceso y permanencia en la universidad.
La política de incremento de tasas y reducción de becas es un sinsentido en la situación de crisis donde el acceso a cualquier tipo de formación debe estar inducido no dificultado. Nuestros jóvenes en esta segunda década con un abrumador paro juvenil ¿dónde van a estar mejor que formándose?
Seguimos prestando atención a nuestros estudiantes en todos los ámbitos, pero déjenme que ponga de ejemplo el esfuerzo que se hace desde la oficina de la discapacidad. Nuestra Universidad tiene que hacer mucho por la discapacidad todavía, pero también debemos decir que está haciendo mucho por ellos. La Universidad pública tiene que ser responsable de que nadie deje de acudir a ella, ya sea por dificultades económicas o por discapacidades físicas o sensoriales que dificulten el acceso a un estudio compatible con sus necesidades.
Continuamos nuestra tarea de atención a los campus de Huesca y Teruel. Lamentamos no poder hacer los esfuerzos económicos de inversión que necesita nuestro querido campus oscense pero seguimos apostando decididamente por su consolidación al igual que con el campus de Teruel facilitando con nuestras posibilidades y la importante colaboración de otras entidades la apuesta por el desarrollo de su investigación y nuevos postgrados. Nuestro apoyo también a la Escuela Universitaria Politécnica de La Almunia ayudándola en todo lo que podamos a hacer posible su nuevo proyecto de viabilidad.
Proseguimos con nuestra tarea de apertura social y cultural de nuestra Universidad. Estamos sabiendo mantener nuestras actividades expositivas y deportivas, en este entorno de dificultades, e incluso hacer posible la apertura de una colección paleontológica en el edificio paraninfo que abrirá aún más la puertas de este edificio a nuestra sociedad.
Verán que no he querido hacer una larga exposición. Son muchas más nuestras acciones y son muchos más nuestros proyectos. Pero creo que con lo indicado podemos sacar una conclusión importante. La Universidad de Zaragoza, su comunidad universitaria lleva seis años de travesía a través de una crisis social y económica sin precedentes desde la transición democrática en España. La respuesta de la comunidad universitaria, lógicamente afectada por cierto desánimo y enfado, está demostrando una gran responsabilidad, también en las quejas. Sin embargo con esfuerzo estamos afrontando esta pésima situación al mismo tiempo que modernizamos sus estructuras. El resultado que estoy seguro no verá el actual Consejo de Dirección puesto que tardará en producirse algo más de los dos años y medio que nos restan, será que cuando tienda a cambiar la situación económica esta Universidad estará mejor preparada para afrontar un nuevo crecimiento de la misma.
Muchas gracias.