Más de 400 alumnos aragoneses de 14 institutos han participado en un proyecto europeo de ciencia ciudadana -Socientize- que investiga con células tumorales para avanzar en tratamientos contra el cáncer. La iniciativa es fruto de la colaboración entre el departamento de Educación, Universidad, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón y el Instituto de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos (BIFI) de la Universidad de Zaragoza, con el apoyo de la Fundación Ibercivis.
Para que investigaciones como ésta con células tumorales avancen es necesaria la participación de miles de personas que colaboren en la realización de los experimentos. Eso es lo que han hecho durante los últimos meses alumnos aragoneses de ESO y Bachillerato, que se han encargado de analizar el efecto de compuestos químicos en la muerte de células reales.
Esta colaboración ha permitido a los investigadores avanzar más rápidamente en las comprobaciones y al mismo tiempo los alumnos han podido mejorar sus conocimientos en biología y comprender más fácilmente los conceptos que estudian en clase y sus aplicaciones prácticas.
La consejera de Educación, Universidad, Cultura y Deporte, Dolores Serrat, ha visitado hoy el IES Sierra de San Quílez de Binéfar, uno de los 14 institutos que han participado. Lo ha hecho acompañada por el investigador del BIFI José Manuel Carrodeguas y el director ejecutivo de Ibercivis, Fermín Serrano. Durante el acto han hecho entrega al centro del diploma de reconocimiento por su colaboración con el programa Ciencia Ciudadana e Inteligencia Colectiva.
Concretamente durante este proyecto los estudiantes aragoneses han visualizado imágenes de distintos cultivos celulares; imágenes tomadas por un microscopio de fluorescencia invertida. Posteriormente debían contestar preguntas sencillas como ¿Es la célula circular o alargada? o ¿Está el núcleo fragmentado? con las que determinar cuál era el estado de las células y conocer qué estaba sucediendo en cada cultivo. De esta forma han ayudando a los investigadores a saber si los medicamentos aplicados a cada uno de ellos están funcionando.
Los alumnos han generado una gran cantidad de datos que sería muy costosa de obtener sin su participación. Así, en lugar de que los investigadores tengan que revisar cada uno de los videos obtenidos de los distintos cultivos, éstos se dividen y distribuyen entre los jóvenes que de esta forma han contribuido de forma activa en el estudio de la muerte celular presente en enfermedades cancerosas.
El Departamento de Educación y el BIFI colaborarán estrechamente para acercar la biología y la física a los estudiantes de ESO y Bachillerato dentro del programa educativo Ciencia Viva del Gobierno de Aragón. Con estas iniciativas se pretende fomentar además la vocación científica entre los jóvenes y dar a conocer las investigaciones en las que trabaja el BIFI.
