Los III Circuitos Científicos de la Universidad de Zaragoza y el programa Ciencia Viva han conseguido llegar al doble (de 600 a 1.200) de estudiantes de 16 años del medio rural de Aragón, que pueden conocer de forma directa la labor y las instalaciones de investigación del campus público aragonés, desde que se pusiera en marcha esta actividad, financiada por FECYT, hace ahora dos años. Además esta acción ha logrado triplicar los itinerarios científicos ofertados, de dos a siete, y multiplicar por dos (de 12 a 24) el número de Institutos de Secundaria Obligatoria (IES) participantes, distribuidos por la geografía aragonesa.
Esta amplia oferta en divulgación científica no sería posible sin la activa participación de más de un centenar de investigadores de la Universidad de Zaragoza y de institutos mixtos de investigación con el CSIC, que de forma voluntaria dedican parte de su tiempo a mostrar a estos futuros universitarios su trabajo diario, abriendo los laboratorios a la curiosidad de los estudiantes aragoneses.
Los Circuitos Científicos, que buscan despertar la vocación científica de estos jóvenes de 16 años, han sido presentados esta mañana en el Aula Magna del Paraninfo por el rector Manuel López Pérez, Melanie Scott Taylor, jefa de la Unidad de Innovación de Política Educativa del Departamento de Educación del Gobierno de Aragón, y Gonzalo Remiro, del Departamento de Cultura Científica y de la Innovación de la FECYT. Además ha asistido el vicerrector de Política Científica, Luis Miguel García Vinuesa, el vicerrector de Estudiantes, Fernando Zulaica, así como directores y representantes de los doce centros de investigación participantes.
Esta apertura oficial de los circuitos ha contado con la conferencia Supermateriales impartida por Agustín Camón, investigador y divulgador científico del Instituto de Ciencia de Materiales de Aragón (centro mixto CSIC-UZ), ante más de un centenar de estudiantes invitados, procedentes de los IES Ramón y Cajal, Corona de Aragón y Portillo de Zaragoza. En la misma, Camón ha repasado los nuevos materiales del futuro, que ya se están preparando en los centros de investigación y que, sin duda, estarán en la base de las futuras revoluciones tecnológicas.
Una experiencia que crece
De los 600 alumnos de 16 años del medio rural, que visitaron los laboratorios de la institución académica en el 2011 a través de dos itinerarios, se pasó a 1.000 alumnos y a cuatro itinerarios un año después, y a 1.200 estudiantes y a siete circuitos científicos en la actual edición. En concreto, a los cuatro itinerarios científicos del año pasado politécnico, veterinario, física de astropartículasy química y materiales, se incorporan ahora los de sostenibilidad energética, arqueología celtibérica y arqueología romana.
Además, también se ha duplicado desde su inicio el número de Institutos de Educación Secundaria (IES) que se benefician de esta acción, ya que de los 12 iniciales, en estos momentos participan 24, ubicados en Ejea de los Caballeros, Tauste, Calatayud, Tarazona, Zaragoza, Barbastro, Binéfar, Monzón, Fraga y Huesca, Alcañiz, Andorra, Híjar, Fuentes, Daroca, Monreal y Teruel. En concreto, 16 IES, es decir, 800 alumnos, proceden del medio rural y ocho IES, con 400 alumnos, de Zaragoza ciudad.
Conferencias y visitas
Desde esta semana hasta finales de enero, científicos de los doce laboratorios y centros de investigación han comenzado a trasladarse a las aulas de institutos del medio rural de Aragón para explicar su trabajo a los jóvenes y poder contestar a sus preguntas y dudas (ver calendario en el documento adjunto). A lo largo de todo el mes de febrero, los estudiantes --que se trasladarán en 16 autobuses --conocerán las infraestructuras, laboratorios y hasta yacimientos arqueológicos.
Las visitas se realizan en grupos de 50 alumnos, entre las 10.00h y las 13.00 horas. Cada grupo, durante esa mañana, se desdobla en dos de 25, para hacer las visitas más ágiles y cómodas. El circuito politécnico atenderá a 300 alumnos; el resto a 200, salvo las visitas a los yacimientos arqueológicos, que atenderán cada uno a un centenar de estudiantes.
En concreto, los cuatro itinerarios politécnico, veterinario, física de astropartículasy química y materiales, ofertados hasta ahora, han permitido mostrar a estos jóvenes desde el sistema solar en 3D, biodiesel producido con aceites domésticos, muestras de ovejas con scrapie hasta ultrasonidos para conservar alimentos líquidos. Además, los estudiantes seguirán teniendo la oportunidad de conocer numerosas de las aplicaciones de nanopartículas, química, supermateriales y criogenia en la vida diaria, así como experimentos sobre la materia íntima del Universo.
En esta tercera edición, los alumnos van a poder profundizar en otras temáticas a través de los nuevos itinerarios sostenibilidad energética, en el Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (CIRCE), un edificio bioclimático, con escaso impacto ambiental por el uso de técnicas de construcción sostenible y que aloja laboratorios sobre el vehículo eléctrico o la biomasa; arqueología celtibérica (Yacimiento de Segeda, en Mara, el mayor yacimiento arqueológico celtibérico de España) y arqueología romana (Yacimiento de Bílbilis, una ciudad provincial romana que puede ser visitada en su totalidad, porque no ha habido construcciones posteriores).
Estas nuevas incorporaciones se suman a los itinerarios ya veteranos:
--politécnico (el Instituto Universitario de Nanociencia
