Leído por
el Excmo. Sr. Rector en la concentración
del 20 de marzo de 2003
A FAVOR DE LA PAZ Y CONTRA LA GUERRA
EN IRAK
No se ha evitado, la guerra ha comenzado. A pesar de la opinión
contraria de una buena parte de los ciudadanos españoles,
opinión que compartimos millones y millones de personas
en todo el planeta, la guerra ha comenzado esta noche.
Los Estatutos de nuestra Universidad, hasta
ahora vigentes, citaban entre los fines de la misma "prestar
un decidido apoyo a la causa de la paz"; los recientemente
aprobados, que la Universidad "asegurará
el pleno respeto a los principios de libertad, igualdad y
no discriminación, y fomentará valores como
la paz, la tolerancia y la convivencia entre grupos, así
como la integración social".
Si hay una cuestión capaz de unir a todos los universitarios,
esa es precisamente la defensa de la Paz.
Desde la Universidad pensamos que el mejor modo de defender
la Paz no puede ser nunca iniciar una guerra. Que el
mejor modo de impedir el uso de armas de destrucción
masiva no puede ser el inicio de una guerra que llevará
a la destrucción masiva y a la muerte de cientos de
miles de personas.
Las armas nucleares, químicas y bacteriológicas
nunca serán instrumentos para alcanzar la Paz o la
seguridad, sino artefactos con capacidad para destruir
todo el planeta. Su completa eliminación
es una aspiración de la humanidad, pero es
una aspiración que nunca podrá alcanzarse si
desde algunos estados se opta por debilitar los organismos
que, como las Naciones Unidas, han permitido controlar la
existencia de dichas armas.
Las universidades son espacios privilegiados para la reflexión,
el análisis, la investigación y la sensibilización
sobre estos retos, por lo que nos comprometemos a multiplicar
las actividades académicas centradas en estos temas,
en la convicción de que la educación
y la cultura han de ser los ejes sobre los que construir sociedades
más justas y dialogantes.
Desde las universidades nos comprometemos también
a intensificar aquellas actividades que promuevan la educación
para la Paz, así como la investigación que promueva
la cultura de la Paz y el desarme.
Como rechazo a la guerra, les invito a guardar dos
minutos de silencio.
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